La vicepresidenta Victoria Villarruel sufrió un tropiezo en la conformación de las comisiones del Senado. Solo pudo integra a cuatro de las seis que se había propuesto. Pero al mismo tiempo, reabrió una polémica que parecía que el presidente Javier Milei había cancelado, el incremento en las dietas de los senadores. A pesar de haber retrocedido en el incremento previsto en dos cuotas, Villarruel decidió validar una suba del 16 por ciento de los haberes registrada en enero pasado. La decisión pasó por ahora inadvertida ya que se conoció cuando Javier Milei volaba hacia Tierra del Fuego para encontrarse con la generala Laura Richardson.
La decisión de Villarruel eleva nuevamente el nivel de ruido que existe con Milei. A mediados de marzo, en medio de los brutales ajustes que Milei sometía a la administración nacional, se conoció que Villarruel y el titular de la Cámara de Diputados, Martín Menem, habían otorgado a los legisladores nacionales los mismos aumentos que a los trabajadores legislativos: 16 por ciento en enero y un 12 por ciento en febrero. Tras las críticas, Milei ordenó retrotraer las dietas a diciembre sin los aumentos. Menem obedeció de inmediato, pero Villarruel dilató la decisión y la aceptó a regañadientes. Incluso volvió a desafiar a Milei al defender el aumento de las dietas durante una entrevista televisiva.
La controversia resurgió ahora, cuando se conoció que la Vicepresidenta no dio marcha atrás con toda la resolución y mantuvo el aumento del tramo del 16 por ciento de enero, que los senadores cobraron ante el asombro de los diputados del otro lado del Salón de Pasos Perdidos que divide el Palacio legislativo.