Según un informe llevado a cabo por el Observatorio de la Deuda Social de la UCA, uno de cada tres chicos argentinos -en números, más de cuatro millones-, pasa hambre, provocando así la ausencia de los nutrientes necesarios para llevar a una salud física y psíquica adecuada que le permita desarrollarse en sociedad.
El estudio alerta sobre la emergencia alimentaria a la que están expuestos los menores de edad, muchos de los cuáles ya se encuentran en una situación extrema.
LA POBREZA AVANZA: 1 DE CADA 3 CHICOS NO COME BIEN EN ARGENTINA
